Los cigarrillos electrónicos y vapeadores desechables, económicos y de colores brillantes, siguen ganando popularidad. Estos dispositivos convierten un líquido que contiene nicotina saborizada en un vapor que las personas aspiran en cientos o miles de inhalaciones, lo que comúnmente se conoce como “vapeo”. En ACS Central Science, un grupo de investigadores informó que, después de unos cientos de inhalaciones, algunos dispositivos de vapeo desechables liberan mayores cantidades de metales y metaloides que los cigarrillos electrónicos recargables más antiguos y los cigarrillos tradicionales, lo que aumenta el riesgo de problemas de salud para los usuarios.