Las células solares de perovskita de estaño y plomo han demostrado que tienen propiedades ópticas ideales para obtener rendimientos máximos. Sin embargo, su uso a gran escala se ha visto obstaculizado por problemas de estabilidad en sus superficies, como la oxidación, defectos que las hacen vulnerables o desajustes químicos en las capas de transporte de carga.
Las monocapas autoensambladas (SAMs) son estructuras ordenadas de moléculas que se forman espontáneamente en superficies sólidas por interacciones químicas específicas. Las SAMs pueden ser capas de transporte alternativas para este tipo de células solares que permitirían manejar los problemas que presentan en la superficie. El objetivo del proyecto SAMper del doctor Luis Lanzetta es diseñar dispositivos químicamente inteligentes, con capacidad de curación de perovskita y de neutralización de oxidantes, para obtener células ultraestables y altamente eficientes.
En opinión de este investigador, «la revolucionaria funcionalidad de curación y protección de los nuevos SAM es transferible a todas las perovskitas de haluros y se espera que tenga un gran impacto en múltiples aplicaciones de perovskitas (PV, LED, transistores, fotodetectores). Estos campos son de importancia científica clave para permitir una optoelectrónica altamente eficiente, duradera y de bajo coste», comenta.