image: A Campbell-Stokes sunshine recorder which measures daily sunlight duration located at the Barbados Meteorological Service weather station, Charnocks, Barbados.
Credit: Rachel Lowe (BSC)
En un avance hacia la implantación de sistemas de alerta temprana de enfermedades basados en información climática, un equipo de investigadores, agentes de salud pública y meteorólogos han desarrollado un modelo de predicción capaz de pronosticar brotes de dengue en el Caribe con hasta tres meses de antelación. El estudio, dirigido por Chloe Fletcher y Rachel Lowe, del grupo de Resiliencia en Salud Global (Global Health Resilience) del Barcelona Supercomputing Center-Centro Nacional de Supercomputación (BSC-CNS), presenta un modelo predictivo capaz de captar la compleja interacción entre las sequías, el calor y las precipitaciones extremas en el riesgo de brotes de dengue en Barbados.
Estos fenómenos meteorológicos extremos son cada vez más frecuentes e intensos en el Caribe debido al cambio climático. Al mismo tiempo, los brotes de dengue y otras enfermedades transmitidas por mosquitos, como el Chikunguña y el Zika, se han vuelto cada vez más comunes y explosivos en toda la región en los últimos 15 años.
Impulsada el cambio climático, la incidencia mundial del dengue también ha aumentado significativamente en las últimas dos décadas, lo que supone un importante reto para la salud pública. En 2024, se notificaron 14,1 millones de casos de dengue en todo el mundo, superando el hito histórico de los 7 millones observados en 2023, donde más del 92 % de los casos se registraron en América. También se produjeron brotes importantes en el sudeste asiático y África, e incluso Europa ha experimentado transmisiones locales esporádicas en países como Italia, Francia y España, lo que indica un riesgo creciente de establecimiento de la enfermedad a medida que los mosquitos que transmiten el virus se expanden por todo el continente.
El efecto de fenómenos meteorológicos extremos sucesivos en el riesgo de brotes de dengue
El modelo presentado en el estudio, que se publica en la prestigiosa revista The Lancet Planetary Health, incorpora interacciones entre variables climáticas, como indicadores de temperatura y precipitaciones con distintos intervalos temporales, para pronosticar la probabilidad de un brote de dengue y el número aproximado de casos en Barbados con tres meses de antelación. En concreto, la investigación puso de manifiesto que las condiciones extremadamente secas cinco meses antes de un brote, seguidas de temperaturas más cálidas tres meses antes y fuertes precipitaciones un mes antes, provocaban la mayor incidencia de dengue. Siguiendo este planteamiento, el modelo identificó correctamente el 81 % de los brotes observados durante la validación del modelo para el período de 2012 a 2022, mejorando de manera significativa los modelos de vigilancia tradicionales.
“Este enfoque de modelización nos permite tener en cuenta el efecto de la ocurrencia de fenómenos meteorológicos extremos sucesivos en el riesgo de brotes de enfermedades”, explicó Chloe Fletcher, primera autora del estudio y doctoranda en el grupo de Resiliencia en Salud Global del BSC. “Al centrarnos en las interacciones entre los diferentes factores climáticos, pudimos prever mejor el riesgo de brotes de dengue en Barbados. Estas previsiones proporcionan a los responsables de la toma de decisiones a escala local y regional información útil y oportuna para mitigar o prevenir la aparición de un brote”.
Sistema nacional de alerta temprana del dengue en Barbados
En colaboración con el Ministerio de Salud y Bienestar de Barbados y otros organismos sanitarios y meteorológicos regionales, el equipo científico aplicó el modelo en un contexto real antes de la Copa del Mundo de Cricket Twenty20 (T20) masculina, que se celebró en Barbados en junio de 2024. El modelo pronosticó una probabilidad del 95 % de un brote de dengue basado en los casos observados y las condiciones climáticas previstas para marzo de 2024, lo que provocó, antes del torneo, controles adicionales y nuevos tratamientos en los lugares de cría de mosquitos conocidos alrededor de la sede del evento y las comunidades cercanas.
Rachel Lowe, profesora ICREA, líder del grupo de Resiliencia en Salud Global del BSC y autora sénior del estudio, destacó la relevancia de la investigación: “Este estudio supone un paso más para la implantación de sistemas de alerta temprana de enfermedades infecciosas sensibles al clima en el Caribe. Lo que hemos puesto a prueba en Barbados podría adaptarse a otras regiones que se enfrentan a riesgos similares para la salud pública”. A partir de 2025, el modelo formará parte de un sistema nacional de alerta temprana del dengue en Barbados.
De cara al futuro, el equipo de investigación tiene previsto seguir validando el modelo y explorar su aplicación a otros contextos geográficos y enfermedades sensibles al clima. Su trabajo es un buen ejemplo de cómo la colaboración interdisciplinar ―que abarca la epidemiología, la climatología y la salud pública― puede ayudar a mitigar los riesgos de enfermedades en una época de creciente incertidumbre climática.
Pie de foto: Un heliógrafo de Campbell-Stokes, que sirve para medir las horas diarias de luz solar, ubicado en la estación meteorológica del Servicio Meteorológico de Barbados, en Charnocks, Barbados. Autor: Rachel Lowe (BSC).
Contacto prensa BSC: communication@bsc.es
Journal
The Lancet Planetary Health
Method of Research
Computational simulation/modeling
Subject of Research
Not applicable
Article Title
Compound and cascading effects of climatic extremes on dengue outbreak risk in the Caribbean: an impact-based modelling framework with long-lag and short-lag interactions
Article Publication Date
18-Aug-2025